
Por Miguel Escudero
10 Jul 2025, 23:58 PM EDT
El caso de un trabajador colombiano, Jheisson Bustos-Martínez, detenido por autoridades migratorias en Estados Unidos ha dejado en claro la rigidez en el cumplimiento de las leyes migratorias. Y es que a pesar de haber ingresado legalmente al país hace años y no contar con antecedentes penales, el hombre fue arrestado por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) luego de permanecer más tiempo del permitido por su visa.
Su historia pone en evidencia los estrictos controles sobre personas que, aunque hayan llevado una vida tranquila en el país, enfrentan consecuencias severas por irregularidades migratorias.
Según información confirmada por el medio Newsweek, Jheisson Alcides Bustos-Martinez entró a EE. UU. con una visa B-2 de turista y permaneció en el país durante más de siete años, sobrepasando ampliamente el tiempo autorizado. Durante ese período, residió en el estado de California y fue descrito como un hombre trabajador y respetuoso de las leyes.

La detención de Bustos-Martinez y su contexto migratorio
El arresto ocurrió cerca de las 6:45 hrs. (tiempo local), el pasado 13 de junio, cuando Jheisson se encontraba en compañía de su padrastro. Aunque Bustos-Martinez no tenía antecedentes penales, ni enfrentaba cargos por delitos, su detención fue considerada legal por ICE bajo las actuales políticas migratorias que permiten la deportación de personas que hayan perdido su estatus.
Su pastor Juan Cervantes, citado por Newsweek, lamentó la situación, asegurando que Bustos-Martinez es un miembro activo de la comunidad y que “no ha hecho nada malo” más allá de haber permanecido en el país más del tiempo permitido.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) confirmó que Bustos-Martinez ingresó a Estados Unidos el 15 de noviembre de 2017 con una visa B2, la cual permitía una estadía máxima de seis meses. Sin embargo, permaneció en el país por más de siete años sin renovar su estatus migratorio.
Según señaló Tricia McLaughlin, portavoz del DHS, esta prolongada estadía sin autorización convirtió su presencia en Estados Unidos en una violación migratoria que justificó su arresto por parte de las autoridades.
Un reflejo de las políticas migratorias actuales
Tras su arresto, las esposa de Jheisson, y sus dos hijos, manifestaron su preocupación al desconocer el estado de su marido, además de mencionar su temor por una posible obligación a autodeportarse. Hasta el momento, y luego de la intervención del párroco Cervantes y la propia familia de Bustos-Martínez, se desconoce el estatus del padre de familia.
Este caso ocurre en un contexto en el que las autoridades migratorias han intensificado sus operativos contra personas fuera de estatus, sin importar si representan una amenaza o han cometido delitos. Bajo estas directrices, incluso aquellos que han trabajado y construido una vida en EE. UU. durante años pueden enfrentar la deportación si su situación migratoria no está regularizada.
Continúa leyendo:
Proyecto de ley pretende obligar a los agentes del ICE a desenmascararse cuando detienen a inmigrantes