Juan Ayuso, líder del Tour de Romandía después de la contrarreloj

hace 1 semana 54

Juan Ayuso y Carlos Rodríguez, la pareja de jóvenes españoles que dominaron la Itzulia hace 20 días tras la caída que dejó fuera a Roglic, Evenepoel y Vingegaard, continúan en estado de gracia, como demostraron el viernes bajo la lluvia en la complicada contrarreloj del Tour de Romandía: 15,5 kilómetros divididos en cinco kilómetros en subida del 5%, siete kilómetros de falso llano contra el viento, arriba y abajo, como arriba y debajo de los manillares fueron brazos y manos de los corredores, y hacia los frenos, en los cuatro kilómetros finales de descenso tan pronunciado como las peligrosas curvas cerradas y el asfalto empapado hasta la meta.

Ayuso, que terminó cuarto, es el nuevo líder de la carrera suiza, con 7s sobre el belga Van Wilder, 10s sobre el ruso Vlasov, 11s sobre Carlos Rodríguez y 23s sobre el francés Lenny Martínez. Duodécimo es Enric Mas, a 41s de Ayuso. Ellos seis son los favoritos para la victoria final, que se decidirá seguramente el sábado en la etapa reina, con meta en la estación de Leysin, a 1.256 metros, tras una ascensión de 15 kilómetros de primera categoría. “Estoy en una buena posición para intentar defenderla mañana”, proclamó Ayuso, recuperado el ánimo perdido hace 10 días cuando debió abandonar la congeladora Flecha Valona con un ataque de hipotermia. “Estos últimos días no han ayudado a recuperarse porque también ha hecho mucho frío, pero solo queda un día y medio [el Tour de Romandía termina el domingo con una etapa sin grandes dificultades] y luego descansaré un poco. Así que espero, sí, que el cuerpo aguante un día más o así”.

La contrarreloj de 40 kilómetros de media en la primera parte y 50 en la segunda la dominó el campeón norteamericano Brandon McNulty, compañero de Ayuso en el UAE, favorecido al disputar la prueba antes de que comenzara a llover en Oron, entre Lausana y Vevey, al norte del lago de Léman.

“Creo que fue una contrarreloj muy dura, muy dura. Todo el mundo sufrió. Todos mis compañeros de equipo, cuando volvían al autobús tras disputarla, me decían que había sido muy dura. Así que, sí, estaba mentalizado. No tuve grandes sensaciones. También sufrí mucho”, dijo Ayuso a Eurosport mientras hacía rodillo, un buen gorro de lana y ropa de invierno, después de la prueba. El ciclista del UAE fue de los pocos que no perdió tiempo frente a McNulty en la segunda parte de la contrarreloj, la del peligroso descenso, una prueba de su decisión y fortaleza tan concluyente como la manera con la que mantuvo a pulso en el podio un queso de cinco kilos con su mano derecha, y su maestría en el esfuerzo solitario que ya exhibió en marzo ganando la contrarreloj de la Tirreno por delante del gran especialista Filippo Ganna. “Creo que conseguí controlar mi esfuerzo, saber dónde apretar, dónde intentar recuperar un poco. Y luego, sobre todo en la bajada, ha sido bastante complicado. Creo que también gané algo de tiempo porque, sí, tomé algunos riesgos”.

Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y X, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.

Ver artículo completo