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El delta-8 THC es legal en muchos estados, gracias a un vacío en la ley agrícola de 2018. Foto: Hazel Mari/Pexel.Cada vez más estudiantes de secundaria se aventuran a probar el delta-8 THC o como se le conoce comúnmente la “hierba dietética”.
De hecho, un estudio publicado el martes en la revista Journal of the American Medical Association reveló que 11% de los estudiantes de último año de secundaria de Estados Unidos habían probado este componente psicoactivo del cannabis.
La Escuela de Medicina Keck de la Universidad del Sur de California llevó a cabo la investigación.
¿Qué es el Delta-8 THC?
A veces apodado “hierba dietética” o “hierba-lite”, el delta-8 THC tiene similitudes químicas con el THC delta-9, el componente psicoactivo principal de la marihuana.
El delta-8 THC es legal en muchos estados, gracias a un vacío en la ley agrícola de 2018.
Aunque suene menos potente, los expertos advierten que no deberíamos asumir que los efectos del delta-8 son más suaves, especialmente dado que aún faltan investigaciones completas sobre sus impactos.
Adolescentes experimentan con la “hierba dietética”
Según datos de la encuesta Monitoring the Future, que recopiló información de cerca de 2.000 estudiantes, casi el 31% de los estudiantes de último año de secundaria habían consumido marihuana en 2023.
Adam Leventhal, investigador principal y director del Instituto de Ciencias de las Adicciones de la Universidad del Sur de California, comentó sobre el fenómeno.
Aunque esperaba cierta curiosidad hacia el delta-8 entre los estudiantes de secundaria, le sorprendió la cantidad real de consumo.
Mayor consumo en el Sur y Medio Oeste
El estudio también notó tasas más altas de consumo de delta-8 en el Sur y el Medio Oeste.
En estas áreas, donde la marihuana recreativa aún es ilegal y las regulaciones sobre el delta-8 son mínimas, los productos delta-8 a menudo se comercializan como alternativas a la marihuana.
Vacío legal permite Delta-8 THC
La ley agrícola de 2018 permitió que los productos con THC delta-8 estuvieran disponibles legalmente.
Esta ley legalizó el cáñamo, definido como una planta de cannabis con menos del 0,3% de THC delta-9, pero no mencionó al delta-8.
Ziva Cooper, directora del Centro de Cannabis y Cannabinoides de UCLA, calificó esta omisión como inesperada y un desafío a superar.
“No creo que nadie pensara que esto iba a ocurrir cuando se aprobó la ley agrícola”
expresó Cooper.Impacto del Delta-8 en jóvenes preocupa
Los expertos están preocupados por el impacto potencial del delta-8 en el cerebro adolescente en desarrollo.
Aunque la investigación sobre el THC delta-8 es limitada, dada su similitud química con el delta-9, hay razones para creer que puede conllevar algunos de los mismos riesgos.
“Sabemos que el THC delta-9 parece tener un impacto en la estructura y función del cerebro cuando los jóvenes lo consumen en exceso”, declaró NBC News Scott Hadland, especialista en adicciones del Mass General for Children de Boston.
Los riesgos pueden incluir psicosis temprana, mayor riesgo de esquizofrenia, ansiedad y depresión.
El auge del delta-8 y otros cannabinoides sintéticos ha llevado a pedidos de reforma legislativa para abordar este vacío regulatorio y evitar que los adolescentes accedan a estas sustancias.
Este estudio resalta la creciente tendencia del consumo de THC delta-8 entre los estudiantes de último año de secundaria y la urgente necesidad de acción legislativa.
Los expertos llaman a cerrar este vacío regulatorio podría proteger a los jóvenes de las consecuencias imprevistas de este compuesto legal del cannabis.
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